¿Es difícil la carrera? “No tanto. Al principio tiene ramos de ciencias básicas, como biología. También pasan anatomía, farmacología, que son más difíciles. A partir del segundo año son solo asignaturas que le llamamos disciplinares, que son las que uno va a trabajar más adelante. Si a la persona le gusta, le va a ir bien. Hay que dedicarse, estudiar harto”, responde la matrona Francisca Rojo (34), egresada de matrona de la Universidad de Valparaíso, y docente de las cátedras de Salud Fetal y Neonatal, y Atención en Salud Neonatal, de la misma entidad.
Sus funciones
Rojo detalla que el área de obstetricia tiene que ver con todo lo que es gestación, y puericultura, con el cuidado de los niños. Respecto a su rol en lo que respecta a lo primero, dice que pueden atender partos normales, mientras que quienes deben atender las cesáreas, que es una intervención quirúrgica, la debe hacer un médico. “Los médicos obstetras entran con ayudantes, que tienen que ser médicos. Los matrones estamos como arsenaleros: proporcionando el instrumental al especialista”.
Lizama aclara que sus funciones varían según donde trabaje. “En el sistema público son las matronas las que llevan la conducción del parto, sobre todo en embarazo normales. Ahora si hay una alteración del mismo, debe entrar un médico. Mientras que en privado es un médico obstetra el que se encarga del parto, trabajando con un staff de matrones o matronas”.
¿Quién diagnóstica?
Silva hace hincapié en que siempre el que diagnóstica, pronostica, y trata es un médico cirujano. “Otras profesiones como nutrición, tecnología médica, matronas, terapeuta ocupaciones, son carreras de la salud que no están autorizadas para hacer diagnóstico y pronóstico de las enfermedades. Pero las matronas sí pueden recetar anticonceptivos orales, y atender partos naturales”, agrega.
Rojo hasta el año pasado trabajó la UCI del área de neonatología de la Clínica Reñaca. “La neonatología consiste en la asistencia de las primeras horas de vida de los recién nacidos, que se consideran cruciales para determinar posibles complicaciones futuras y reaccionar ante ellas. Nosotras trabajamos con pediatras, y atendemos a los recién nacidos”.
¿Y cómo era su día a día? “Por ejemplo, el pediatra neonatólogo hacía la visita, y nosotras los acompañábamos. Ellos dejan indicaciones de medicamentos, y nosotras dejamos indicaciones de matronería: cambios de posición, de muda, tomar exámenes, vigilar su evolución. Educar a sus mamás: cómo sacar leche, cómo ocupar el lactario”.
Vía LUN